La Potencia Contratada es lo que se conoce como «término fijo de la factura», y es la máxima potencia que puedes consumir en un determinado instante.
Este concepto en la factura eléctrica conlleva un coste consumas lo que consumas de energía, siempre pagarás un dinero en función de la potencia que tengas contratada (aunque no consumas nada).
Por esta razón, es importante ajustar y contratar la potencia mínima necesaria para no pagar de más, pero tampoco contratar menos porque en ese caso el ICP (Interruptor de Control de Potencia) cortará la luz, lo que se conoce vulgarmente como «saltar los plomos» si tienes una vivienda, o pagas penalizaciones si tienes un negocio.
Podemos decir, que el objetivo es calcular el valor óptimo de la potencia contratada para que el cliente pague lo mínimo, obteniendo un AHORRO directo en la factura de la luz.
Para ello, realizamos un estudio personalizado a nuestros clientes calculando la potencia óptima que deben contratar. Este estudio lo repetimos cada 12 meses para ajustar cada año la potencia al perfil de consumo del cliente, ya que las necesidades de consumo, equipos o incluso la normativa puede variar.
La información que necesitamos por parte de los clientes son las 12 últimas facturas (o más sencillo todavía, nos mandas la última factura, DNI, y si nos das permiso nosotros obtenemos los consumos directamente de tú distribuidora).
Mediante unos algoritmos de cálculo obtenemos la potencia óptima, teniendo en cuenta los valores de consumos de los 12 últimos meses, y las fórmulas de penalización en caso de negocio.
No esperes más para ajustar tú potencia contratada y obtener un ahorro directo en tú factura de la luz.